El hotel tiene unas instalaciones geniales, la habitación era amplia y muy cómoda. Disfruté del desayuno buffet que era increíble, tenía de todo, desde frutas hasta gominolas. Aunque la atención al cliente podría mejorar, en general, pasé una gran estancia.

Vistas increíbles desde la azotea y un ambiente moderno que te hace sentir en el futuro, ¡la Sagrada Familia nunca se vio tan bien!

La limpieza de la piscina era más aleatoria que mis fines de semana de fiesta.

La terraza que enamora

Disfruté de la azotea con una piscina espectacular y vistas impresionantes que me hicieron sentir como si estuviera en un paraíso. El desayuno buffet era variado con opciones frescas y deliciosas.

El trato del personal fue un poco frío y el aire acondicionado de la habitación no funcionaba adecuadamente, lo que hizo que algunas noches fueran incómodas. Además, el baño tiene poca privacidad, lo cual fue un inconveniente.

Los colchones incómodos me hicieron despertar mal.

Las vistas desde la terraza y la piscina son realmente impresionantes, perfectas para relajarse bajo el sol.

La atención al cliente fue decepcionante, ya que el personal parecía desinteresado y poco dispuesto a ayudar con nuestras consultas.

Me encantó la ubicación cerca de la estación de metro, lo que facilitó muchísimo mis desplazamientos para salir de fiesta. Las vistas desde el bar en la azotea son impresionantes, y la variedad del desayuno era excelente, ideal para empezar el día con energía para salir. Además, el ambiente en la terraza era perfecto para relajarse después de una noche intensa.

La piscina en la azotea estaba un poco sucia y no había suficientes tumbonas para todos los huéspedes.

definitivamente regresaría

Las habitaciones son amplias y tienen un minibar a 3 euros, lo cual es genial. Hay un catálogo de almohadas y el café está incluido. Me encantó la azotea con piscina, las vistas son impresionantes, especialmente al atardecer. El desayuno es un buffet increíble, con frutas, charcutería y gominolas.

La terraza proporciona vistas impresionantes y el desayuno tiene una excelente variedad de productos frescos. Sin embargo, el aire acondicionado no funcionó bien y eso fue incómodo. El servicio de alquiler de bicicletas es un gran plus para explorar la ciudad.

La habitación era cómoda y estaba bien equipada, además los detalles de decoración moderna hicieron que la estancia fuera agradable. Aunque las vistas desde la terraza eran increíbles, noté que la atención del personal podría mejorar, ya que no siempre eran muy receptivos. El desayuno era variado y sabroso, lo que ayudaba mucho a comenzar el día con energía.

Recomiendo para parejas en busca de lujo

La comida en el desayuno era increíble, muy variada y con productos frescos. También, el trato del personal de bar fue excelente. hubo una camarera que nos dejó sentir como en casa, sirviendo los mejores cocktails que he probado en mucho tiempo y siempre con una sonrisa.

No era barato, pero estaba aceptable.

La habitación era cómoda, pero el aire acondicionado no funcionó bien las noches.

Las habitaciones son amplias y modernas, ofreciendo comodidad con camas grandes y almohadas increíbles. La terraza del hotel proporciona vistas geniales a la Torre Agbar, y el desayuno tiene una excelente variedad de productos frescos para empezar el día.

Tuve problemas con el aire acondicionado, que no funcionó y nos hizo pasar mucho calor. Además, el baño presentaba inundaciones cada vez que nos bañábamos, y el ruido de la limpieza por la mañana fue un inconveniente notable que interrumpió nuestro descanso. La atención al detalle en artículos de baño también dejó algo que desear, ya que solo ofrecían un botecito de jabón corporal para dos personas.

El hotel tiene un diseño moderno y una terraza espectacular con una piscina en la azotea que ofrece vistas impresionantes. La habitación era amplia, tenía un minibar a precios razonables de 3 euros y un catálogo de almohadas para elegir. Sin embargo, el servicio al cliente dejó mucho que desear. Al llegar, tuvimos problemas con el check-in, donde el personal fue grosero y nos hizo esperar mucho tiempo. También, la limpieza de la terraza de la piscina no era la mejor, había mesas sucias y no había suficientes tumbonas. La variedad del desayuno es buena, pero el zumo de naranja no era natural y faltaba un servicio de huevos al momento. No me gustó que el baño tuviera paredes de cristal, ya que molestaba a mi pareja cuando encendía la luz de noche.

la terraza del hotel es un auténtico paraíso

terraza espectacular, decoración moderna

proceso de check-in lento

La piscina en la azotea era como tener un micromundo en el cielo, perfecto para sumergirse en las vistas de Barcelona. Despertar cada mañana y ver la Torre Agbar desde mi ventana era más revitalizante que un espresso por la mañana. Además, el desayuno era un festín, había una variedad de frutas frescas que le darían celos a cualquier mercado local.

Problemas con el aire acondicionado